Laurinaitis decretó que si Sheamus volvía a tocar a un árbitro accidentalmente o a propósito sería despedido. Por eso colocó al "Guerrero Celta" mano a mano contra Mark Henry con un árbitro especial invitado: Daniel Bryan. El irlandés sufrió el poder de Henry al comienzo mismo, y Bryan le impidió atacar a Henry por la fuerza, diciéndole: "¡¡Golpéame!!" Esa distracción le permitió a Henry tumbar a Sheamus con un Clothesline brutal. La cuenta no hubiese llegado a tres, pero Bryan contó a una velocidad vertiginosa y le dio la victoria a Mark Henry. Acto seguido, Bryan le tiró la camiseta de árbitro a Sheamus y quiso irse de rositas, pero el "Gran Tiburón Blanco" fue en su busca y lo agredió a la fuerza bruta. Lo metió en el ring, y quiso de paso vengarse de Henry con su relampagueante Brogue Kick, pero Bryan lo sorprendió con una Kick en la mandíbula y luego lo encerró en el brutal y desesperante Yes! Lock. Sheamus quedó doblegado, pero no dio el más mínimo signo de sumisión, demostrando una gran valentía. Eso sí, Daniel Bryan tienen en mente llevarse este domingo el World Heavyweight Championship, ¿lo logrará?
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