En el vestuario, Theodore Long anunció al escocés que, si no empezaba a ganar, debería dejarlo ir. Por lo cual, si esta noche McIntyre era derrotado, sería despedido. Su oponente era nada más y nada menos que Justin Gabriel. Justin comenzó con su estilo habitual, pero Drew estaba muy agresivo. Aunque es cierto que estaba muy preocupado por poder ser descalificado o ser distraído. Entonces, Gabriel invirtió un movimiento de Drew y lo finalizó en un DDT reforzado que derrumbó al escocés sin piedad. Acto seguido, Justin Gabriel voló desde la tercera cuerda con su 450 Splash para hacerse con la victoria. Tras el combate, Teddy desde la pantalla gigante dijo que debía dejarlo ir. Y así lo hizo: Drew McIntyre está despedido.
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